La empresa de Cupertino ha soltado una frase que podría ser perfectamente entendida como una declaración abierta de que Apple está discriminando las aplicaciones que rechaza o acepta para ser colgadas en la App Store en base a sus desarrolladores.
La compañía no va a publicar de momento cuales son los entresijos que debe sortear un programa para que éste se ponga a libre disposición y descarga en la tienda, sin contar que no acepta ni software malicioso, ni herramientas de hackeo ni aplicaciones pornográficas, aunque alguna ya se ha escapado de este control.
De todas formas, la empresa ha reconocido que está incrementando la comunicación con la comunidad de desarrolladores para que haya el mínimo de disgustos posibles y que el trabajo de cada programador no llegue a verse en la tienda. Lo que es inquietante es la respuesta de Apple a una pregunta que nos limitamos a reproducir literalmente de la fuente original, para que no haya malas interpretaciones:
A la pregunta de “si un desarrollador os manda una idea para un programa para el iPhone, ¿le decís por adelantado si su aplicación estará admitida o no?”, la respuesta ha sido: “depende de qué desarrollador”.
Hala, ahí queda eso.
Vía: Macworld
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